La decisión fue oficializada en el Boletín Oficial y generó fuerte rechazo gremial. Peligran al menos 50.000 empleados públicos.
En medio de un clima de creciente tensión en la administración pública, el Gobierno nacional publicó una resolución que habilita el otorgamiento de unidades retributivas adicionales, es decir un plus salarial, a los funcionarios que reduzcan su dotación de personal. La medida, que premia con incentivos económicos a quienes lideren despidos, fue defendida por la Casa Rosada como parte de su estrategia de ajuste y eficiencia estatal.
Según lo dispuesto en el artículo 5° de la resolución administrativa difundida en el Boletín Oficial, podrán asignarse unidades retributivas (UR) extra “en función del ahorro presupuestario generado por la reducción de dotación de personal” en cada jurisdicción. El cálculo del beneficio se realizará previa intervención de las áreas responsables del control presupuestario y de transformación del Estado.
El gremio ATE denunció la medida como un “incentivo perverso” para destruir puestos de trabajo, y convocó a un paro con movilización para este jueves.
Desde el Ejecutivo destacaron que el sistema ya existía como un esquema de “premios por mérito” y que ahora simplemente se aplicará en función del cumplimiento de objetivos de reducción del gasto.
El anuncio llega justo antes del vencimiento de unos 50.000 contratos en el Estado, lo que podría implicar una nueva ola de cesantías. El gremio estatal exige la renovación automática de esos vínculos laborales y el reinicio de las paritarias, argumentando que los sueldos han quedado rezagados frente a la inflación.
